Nada que ver tuvo con el bautizo de Dylan, el primer hijo en común del cantante y su mujer. Aquel 25 de mayo de 2013, ante más de un centenar de invitados, Alejandro y Raquel no sólo bautizaron a su pequeño, sino que también aprovecharon para contraer matrimonio por sorpresa en una fiesta por todo lo alto.
En esta ocasión, el número de invitados fue considerablemente más bajo. Sólo asistieron los familiares y amigos más íntimos. Uno de los invitados VIP al evento, que comenzó sobre las ocho de la tarde, fue el exministro del Partido Popular José María Michavila, que también ha estado presente en otras celebraciones de la pareja.
La ceremonia ha sido eminentemente familiar, y aparte del trasiego de varias furgonetas en la entrada de la finca, nada apuntaba a que se estuviera organizando una gran celebración en la segunda residencia de Alejandro Sanz.
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